La jornada 16 de las eliminatorias sudamericanas rumbo al Mundial de Fútbol 2026 promete emociones al rojo vivo. Con Argentina ya con el boleto en la maleta, el foco de atención se traslada a las selecciones que hoy podrían sellar su clasificación directa o, por el contrario, quedar contra las cuerdas.

Ecuador y Paraguay, ambos con 24 puntos, tienen la mesa servida. Si logran sumar de a tres en sus respectivos compromisos ante Perú y Brasil, asegurarán pasaje directo a Norteamérica, sin escalas ni calculadoras. Para los dirigidos por Félix Sánchez Bas (Ecuador) y Daniel Garnero (Paraguay), este puede ser el partido del año.

Brasil, por su parte, se juega más que tres puntos ante los guaraníes. Con 22 unidades y en zona de clasificación directa, una victoria lo encaminaría firmemente hacia su vigésimo tercera Copa del Mundo consecutiva. Pero no hay margen para el error: una derrota podría encender las alarmas en la era post-Tite, ahora bajo la conducción de Carlo Ancelotti, que aún busca consolidar su estilo en el Scratch.

Colombia y Uruguay (ambos con 21 puntos) también tienen su final adelantada. Los cafeteros visitan a la poderosa Argentina, mientras que los charrúas reciben a Venezuela en un duelo que definirá puestos clave. La Vinotinto, con 18 puntos y aferrada al último boleto del repechaje, se juega su última bala en Montevideo. Si cae, sus opciones se esfuman.

Más abajo en la tabla, selecciones como Chile, Perú y Bolivia solo aspiran a una hazaña matemática. Cada tropiezo los aleja de la cita mundialista y los acerca a un prematuro adiós.

Con solo tres fechas por disputarse después de esta jornada, el margen de error es mínimo. Hoy, más que nunca, las eliminatorias se viven como finales. Cada gol puede ser el pasaporte al sueño o el billete de regreso anticipado. El camino a Norteamérica 2026 entra en su recta decisiva… y no hay espacio para pestañear.