La Franja de Gaza vivió este jueves una de las jornadas más devastadoras desde el inicio del conflicto: al menos 63 personas murieron a causa de ataques israelíes, según informaron fuentes médicas locales. En medio de esta tragedia humanitaria, el gobierno español rompió filas dentro de la Unión Europea y utilizó un término que cada vez resuena con más fuerza a nivel internacional: genocidio.

El primer ministro Pedro Sánchez, visiblemente indignado, declaró que “lo que está ocurriendo en Gaza es un genocidio catastrófico”. Además, urgió a la Unión Europea a suspender su acuerdo de asociación con Israel, acusando a Bruselas de aplicar un doble rasero: imponer sanciones a Rusia por su guerra en Ucrania, pero mantener intactos los lazos con Tel Aviv a pesar de las graves violaciones a los derechos humanos.

Las palabras de Sánchez se producen mientras Gaza permanece asfixiada por un bloqueo casi total impuesto desde marzo. Aunque la ayuda humanitaria comenzó a llegar de forma limitada a fines de mayo, organizaciones de rescate describen escenas “caóticas y mortales” en los puntos de distribución. La población, desesperada, acude en masa, solo para encontrarse con la muerte entre el fuego cruzado.

La cifra total de víctimas palestinas en esta ofensiva supera ya los 37,000 muertos, la mayoría mujeres y niños, según el Ministerio de Salud de Gaza. Mientras tanto, la comunidad internacional guarda silencio o se limita a emitir comunicados tibios. España, con su enérgico pronunciamiento, se convierte en uno de los pocos países europeos en asumir una postura firme.

La demanda de Sudáfrica contra Israel por genocidio ante la Corte Internacional de Justicia, así como los informes de organismos de la ONU y diversas ONG, respaldan la gravedad de las acusaciones. Sin embargo, la respuesta institucional en Europa sigue dividida.

Con esta denuncia, Pedro Sánchez lanza un desafío diplomático al resto de líderes europeos: ¿continuará la Unión Europea priorizando intereses geopolíticos o tomará una postura ética frente al sufrimiento civil?