Siria – Al menos 15 personas pertenecientes a la comunidad cristiana ortodoxa perdieron la vida y decenas resultaron heridas, incluidos varios niños, tras un atentado suicida perpetrado durante una ceremonia religiosa en un templo al interior del país.

De acuerdo con la versión oficial del gobierno sirio, el atacante portaba un chaleco explosivo y se encontraba dentro del templo en el momento de las oraciones. En un acto premeditado, el sujeto activó la carga explosiva, causando una tragedia que ha generado gran conmoción tanto a nivel local como internacional.

Altos funcionarios sirios señalaron que los indicios apuntan a que el atentado fue ejecutado por un miembro del autodenominado Estado Islámico (ISIS), organización que ha perpetrado ataques similares en años anteriores contra minorías religiosas en la región.

Los servicios de emergencia se movilizaron rápidamente para trasladar a los heridos a centros médicos cercanos. Varias de las víctimas se encuentran en estado crítico, según informaron autoridades sanitarias.

El ataque ha generado una ola de repudio dentro y fuera de Siria, y líderes religiosos han condenado enérgicamente el acto violento, haciendo un llamado urgente a garantizar la seguridad de las comunidades vulnerables en zonas de conflicto.

Las autoridades locales mantienen un operativo en curso para determinar cómo el atacante logró infiltrarse en el lugar y si contó con apoyo logístico.