Las intensas lluvias que azotan el centro y sur del estado de Texas han provocado severas inundaciones repentinas, dejando hasta el momento un saldo trágico de 52 personas fallecidas y decenas de desaparecidos. Entre los desaparecidos se reporta un grupo de 27 niñas que se encontraban en un campamento cristiano cuando fueron sorprendidas por la crecida de los ríos y arroyos.
Las autoridades locales, cuerpos de rescate y voluntarios se mantienen desplegados en la zona afectada para intensificar las labores de búsqueda y rescate, ante la posibilidad de encontrar sobrevivientes. Equipos de emergencia también trabajan para evacuar a cientos de familias que permanecen en áreas de alto riesgo por la acumulación de agua.
El gobernador de Texas ha declarado estado de emergencia en varios condados afectados y ha solicitado apoyo federal para hacer frente a la magnitud de la tragedia. Asimismo, se recomienda a la población mantenerse alerta a los boletines meteorológicos y seguir las indicaciones de las autoridades.
Las lluvias continuarán durante las próximas horas, por lo que se prevé que la situación pueda agravarse en zonas vulnerables.

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